viernes, 7 de septiembre de 2012
70 años
70 años son las edades de mis abuelos, maternos, que no les llega todo ese tiempo a la cara, siempre tan joviales;y por otro lado están mis paternos, también con 70. 70 años son el tiempo que tiene ya mi colegio(más 19 años, o sea 89), 70 años son los que me gustaría tener y poder aun ver a mis nietos e hijos en un futuro, y si es posible a mis bisnietos. También espero que mis padres tengan 70 años MÁS para gozarlos y enmendar lo erróneo, lo que sabía que estaba mal y no lo arreglaba. Hay demasiadas cosas que tiene 70 años y uno quiere que duren unos 70 más, ojalá.
domingo, 29 de julio de 2012
Una reunión, un vómito y una charla.
Bueno, es la segunda publicación y creo que voy creciendo.
Comencemos. Hace dos días nos reunimos; mis abuelos, sus cuatro nietos y medio(el pequeño Oswald en el vientre de la última hija de mi abuela, Vanessa), mi madre, la hermana siguiente y obviamente la que llevaba en su interior al feto más querido de la familia y el padre de este último, Iván, así como mi hermano; y bueno, pasamos un buen rato en el centro comercial, comimos helados, vimos la cartelera, fuimos al baño, al final del día tragamos y charlamos sobre aquellas terapias biomagnéticas a las cuales hemos concurrido con mucha frecuencia en los últimos meses, deciamos qué tan buena es la energía y la materia, mezclamos la ciencia con las creencias y comenzamos una lluvia de ideas y opiniones, hasta que... Mi primo Valentino, el menor vomitó, supusimos que era el efecto de todo lo que había devorado a lo largo del día y haberlo rematado con chocolate y helado fue lo peor que pudo haber sufrido su estómago, le compraron ropa, le prohibieron comida pesada en el día y fin de la cita familiar; nos despedimos y nos fuimos. Ahora sé que las mezclas atroces para los estómagos tienen grandes consecuencias y también ventajas, voy a almorzar y realmente no sé por donde comenzar.
Comencemos. Hace dos días nos reunimos; mis abuelos, sus cuatro nietos y medio(el pequeño Oswald en el vientre de la última hija de mi abuela, Vanessa), mi madre, la hermana siguiente y obviamente la que llevaba en su interior al feto más querido de la familia y el padre de este último, Iván, así como mi hermano; y bueno, pasamos un buen rato en el centro comercial, comimos helados, vimos la cartelera, fuimos al baño, al final del día tragamos y charlamos sobre aquellas terapias biomagnéticas a las cuales hemos concurrido con mucha frecuencia en los últimos meses, deciamos qué tan buena es la energía y la materia, mezclamos la ciencia con las creencias y comenzamos una lluvia de ideas y opiniones, hasta que... Mi primo Valentino, el menor vomitó, supusimos que era el efecto de todo lo que había devorado a lo largo del día y haberlo rematado con chocolate y helado fue lo peor que pudo haber sufrido su estómago, le compraron ropa, le prohibieron comida pesada en el día y fin de la cita familiar; nos despedimos y nos fuimos. Ahora sé que las mezclas atroces para los estómagos tienen grandes consecuencias y también ventajas, voy a almorzar y realmente no sé por donde comenzar.
jueves, 12 de julio de 2012
Las Hijas de mi Abuela
Hola, vivo con las hijas de mi abuela incluyendo a mi madre en una casa; a pesar de las diferencias y conflictos hemos sabido llevar el lugar en paz y no tirarla por la ventana(aunque ni esta sobreviviría). Hice este blog justamente para eso: COMPARTIR las situaciones más cotidianas que hemos tenido y tendremos. Disfruten, gracias.
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