Aunque no quiera sigues ahí, no permitiéndome encontrar lo tuyo en alguien más, pues quiero efectivamente eso, tu esencia, tu luz, tú aquí, tú siempre, una vida llena de vibraciones cada vez que te vea, desde los tobillos hasta el cabello, todos mi vellos de punta, mis piernas temblorosas, mis mejillas ruborizadas, mi estómago como torbellino, mi piel sudando, mi temperatura baja y mis pensamientos volando, pensando en qué decirte y que al final no te importe, pues esto también te pasa ti. Stay here y dame la idea de que todo está bien y que ambos tenemos una oportunidad, que ninguno se hará daño, que todo lo que pasó está olvidado y empecemos esta vez de nuevo. No quiero sentir tu ausencia por otro año más, por un segundo más.
Multipliquemos por infinito todas esas 'vistas', modifiquemos nuestras rutinas, y que ahora solo escuche tu nombre cuando salga de mi boca, llamándote.
lunes, 16 de noviembre de 2015
viernes, 25 de septiembre de 2015
Odar Majtan...
Cómo decirte que aún te quiero aquí, a mi lado, llenándome de abrazos por aquí y por allá, una partida de scrabble y que esta vez los cafés y el helado sean por mi cuenta, escuchar música y de cada canción recordar a quién se la dedicamos. Cómo decir que quiero que sea mejor que antes, caminatas durante todo el día, ir a todos los parques y de paso yo llenarlos de mejores recuerdos de los que esta vez no me arrepentiré, que me llenes de tus charlas de admi y tu rutina del gimnasio, que me cuentes por tercera vez desde cuándo aquel interés y que ambos busquemos ese papel verde que puse en tu Chiavenato donde nuestras 'vistas' fueron enumeradas. Cómo decirte que sigo escuchando tu nombre y aquella mezcla de nervios y tranquilidad viene a mí nuevamente. Cómo decirte que ya pasó más de un año y sigo pensando en ti y lo que pudo ocurrir, aunque ya no deba pensar en eso último, lo he reemplazado por lo que pudo haber pasado en una dimensión distinta, en la que ambos estamos juntos ahora.
martes, 24 de marzo de 2015
Martin(Majtan)!
Hola Martin:
Sí, hola. Probando 1, 2, 3. Dejemos de probar, no crees? Ya todo encaja, solo eso. Ha sido tan difícil hablar de aquello, tantas mentiras por parte mía cuando lo único que tu querías era sinceridad. Sí, yo te defraudé y lo he estado haciendo constantemente sin saber que al final saldría todo mal. No fue un juego, fue algo de confusión, de no tener las cosas claras, de que "las cosas pasaran solas" y "veamos qué pasa", y perdí, por confiar en el destino y esa maldita inexperiencia, tal vez.
¿Recuerdas cuando me preguntaste "qué sientes al abrazarme?"? Yo sentía todo, y no te dije nada, sentía esa estabilidad, ese balance que necesitaba, esa confianza y seguridad que solo tú me dabas, y solo con abrazarme. En ese momento inventé una salida rápida, un escudo que cubriera mis verdades para seguir con sentimientos reprimidos, lo peor. O esta otra cuando dijiste "me quieres?", mi respuesta fue "un poco", en mi mente estaba un "sí, y mucho, y quiero regresar de este viaje ahora mismo solo para verte guiñar el ojo o leyendo tu Chiavenato y comentando algunas cosas que no entiendo aún o simplemente viéndote respirar(nuestra cosa en común), y porque desde que he llegado no he dejado de pensar en ti, y no por este frío infernal(contradicción) ni por el calor que me estarías brindando, sino porque de verdad te necesito aquí, para que recorras conmigo todo Cusco y elijas la gringa que tanto quieres (de paso encuentres una buena sandía para compartirla)".
Sí, hola. Probando 1, 2, 3. Dejemos de probar, no crees? Ya todo encaja, solo eso. Ha sido tan difícil hablar de aquello, tantas mentiras por parte mía cuando lo único que tu querías era sinceridad. Sí, yo te defraudé y lo he estado haciendo constantemente sin saber que al final saldría todo mal. No fue un juego, fue algo de confusión, de no tener las cosas claras, de que "las cosas pasaran solas" y "veamos qué pasa", y perdí, por confiar en el destino y esa maldita inexperiencia, tal vez.
¿Recuerdas cuando me preguntaste "qué sientes al abrazarme?"? Yo sentía todo, y no te dije nada, sentía esa estabilidad, ese balance que necesitaba, esa confianza y seguridad que solo tú me dabas, y solo con abrazarme. En ese momento inventé una salida rápida, un escudo que cubriera mis verdades para seguir con sentimientos reprimidos, lo peor. O esta otra cuando dijiste "me quieres?", mi respuesta fue "un poco", en mi mente estaba un "sí, y mucho, y quiero regresar de este viaje ahora mismo solo para verte guiñar el ojo o leyendo tu Chiavenato y comentando algunas cosas que no entiendo aún o simplemente viéndote respirar(nuestra cosa en común), y porque desde que he llegado no he dejado de pensar en ti, y no por este frío infernal(contradicción) ni por el calor que me estarías brindando, sino porque de verdad te necesito aquí, para que recorras conmigo todo Cusco y elijas la gringa que tanto quieres (de paso encuentres una buena sandía para compartirla)".
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)